No se permitirá la circulación de vehículos para evitar el trastorno del trabajo que se realizará para las correcciones necesarias. Entretanto, se procederá a la colocación de un vallado para que se pueda trabajar mejor y más rápido, sin perjudicar al resto de los comerciantes que están alrededor, a quienes se les solicita un poco de tolerancia por parte de la Municipalidad. Se procedió a la clausura del edificio, donde no hubo derrumbe ni peligro para terceros, porque la obra en sí ya está monitoreada por los arquitectos del propietario, quienes están sosteniendo las paredes que colapsaron, según explicó la Arq. Carmen Sánchez, jefa de Obras Particulares de la Municipalidad de Ciudad del Este. Indicó que el colapso se produjo a causa del deterioro por el tiempo de la construcción (35 años). En el momento del intento de cambiar el techo, cedieron las paredes laterales, según el relevamiento realizado. “Eso es lo que ocurrió, por lo que nos vimos en la obligación de clausurar el edificio, precautelando la seguridad de los transeúntes principalmente”, enfatizó. También resaltó que las personas que estaban trabajando adentro del edificio ya fueron evacuadas ayer y que actualmente ya no hay nadie adentro, a excepción de las personas que van a trabajar en la demolición de las paredes. En este aspecto, la Arq. Sánchez aclaró que es seguro el trabajo y que este martes 6 de agosto, los técnicos del seguro de la empresa están realizando la pericia para que a partir de esta tarde se pueda proceder al retiro de las paredes que colapsaron. Enfatizó que con una falsa información sobre el supuesto derrumbe se alarma inapropiadamente a la ciudadanía, a causa del desconocimiento de la estructura de una obra. “Son paredes que colapsaron y no hay ningún peligro de derrumbe”, dijo. Tampoco hubo un temblor, como se especuló en un principio; del primer al tercer piso no existe ninguna avería, según explicó, al indicar que le acompañaron en el procedimiento el director de Área Urbana, los arquitectos de Obras Particulares y los fiscales, quienes recorrieron y fotografiaron toda la obra, junto al Arq. Benito Rolón, quien es el encargado de la reforma que deben hacer. Ahora tienen un tiempo para corregir lo que está mal y dejarlo de la mejor manera posible, según anunció la responsable municipal de obras particulares. Señaló que también los bomberos voluntarios hicieron la supervisión, concluyendo que no existe riesgo de derrumbe del edificio y que la Municipalidad está trabajando muy de cerca en el control y acompañamiento a los profesionales para la demolición de lo que está mal y la corrección de lo que tiene que ser para que el edificio funcione como tal. Agregó que para el próximo viernes ya culminará toda la estructura correspondiente a la seguridad para reforzar el edificio y luego proseguir con los trabajos internos que no afectarán a transeúntes, ni a los vecinos, ni a la calle.